Aquellos que lideramos equipos, tenemos el reto continuo de tratar de lograr que estos alcancen sus objetivos, ya sean de facturación, campañas, captación y fidelización clientes, etc. Es evidente que la mejor forma de lograrlo es con trabajo continuo, tipo “hormiguita”, y evitar tener que remontar a última hora. Esto me recuerda mucho a cuando tenía que estudiar para los exámenes en la Facultad. Uno era consciente de que estudiar cada día era la mejor manera, pero al final, en los últimos días, había que dar un empujón, ya que en muchas ocasiones no estábamos muy seguros de conseguir una buena nota.

Con los objetivos de un centro veterinario o cualquier otro negocio, pasa exactamente igual. La clave para obtener buenos resultados es lograr una buena velocidad de crucero y tratar de mantenerla. Un equipo que viene trabajando bien, no debería de tener dificultades en alcanzarlos. Pero en una clínica sabemos que estamos sometidos a posibles contratiempos, de bajas imprevistas de personal, problemas de máquinas que se estropean, suministros que no llegan, citas que fallan, días flojos…

Es por ello que siempre trato de que mis «compañeros de viaje», tengan una ruta clara de trabajo diario, pero que al mismo tiempo estén preparados para un posible SPRINT FINAL.

Aquí dejo 8 consejos para tratar de realizarlo con éxito.

• Objetivo final claro: No debe de haber dudas de cuál es exactamente.
• Visible por todos: Ponerlo en un sitio a la vista de todo el equipo para que no haya nadie que no lo conozca. Por ej. en una hoja colgada en el laboratorio, escrito en una pizarra, post-it en los ordenadores.
• Motivación y empuje. Debe haber un buen trabajo previo de motivación para tener los equipos a tope.
• Información continua: El líder debe de ir informando en todo momento de los avances y de lo que queda.
• Equilibrio mental: Hay que apretar, pero sin que se convierta en una obsesión que acarree problemas de estrés y ansiedad.
• Priorizar: Si no hay tiempo de tirar de muchas palancas, priorizar las que más puedan ayudar.
• Prohibido rendirse: Nunca arrojar la toalla, tan pronto se alejan, como vuelven a acercarse.
• Tener un as bajo la manga para el último día: Múltiples citas, cirugías importantes, contrataciones de planes de salud, etc.

Para terminar, una última cosa. Siempre hay que celebrar los logros, cada victoria, cada éxito, y así sentir que el esfuerzo ha merecido la pena, ya que poco después comenzaremos una nueva «carrera».